Las pruebas internacionales de NSF otorgan la certificación para minimizar los peligros inherentes al trabajar con agentes de bioseguridad de los niveles 1, 2, 3 o 4.

Este certificado también incluye requisitos básicos de diseño, construcción y rendimiento para brindar al personal, productos y protección ambiental; Operación confiable; durabilidad; facilidad de limpieza nivel de ruido, control de iluminación; control de vibraciones; Y seguridad eléctrica.

Este modelo ofrece tres tipos de protección: para el operador, para la muestra y para el medio ambiente. El sistema de flujo de aire es de 70% de recirculación y 30% de escape de aire. El gabinete A2 es adecuado para trabajar con investigación microbiológica en ausencia de productos químicos volátiles o tóxicos y radionúclidos.